Corea del Sur es uno de los países más fascinantes del continente asiático, un lugar capaz de sorprender al viajero tanto por sus bellezas naturales como por sus ciudades tecnológicas y vibrantes. Pero es la cultura coreana la que hace especial la experiencia de viaje en un país que oculta un panorama artístico, musical, histórico y arquitectónico lleno de atractivo y una tradición culinaria única en el mundo.
En nuestra opinión, uno de los términos que mejor resume el carácter especial de esta nación es “armonía”. Corea del Sur, tanto hoy como en el pasado, vive con un ojo puesto en el pasado y otro en el futuro. Su patrimonio histórico se caracteriza por una mezcla de antiguo y moderno que cautiva a cualquier visitante; basta con observar la ciudad de Seúl para darse cuenta: aquí se alzan imponentes rascacielos de cristal justo al lado de casas tradicionales de aldeas Hanok, detenidas en el tiempo.
Este país posee una cultura que roza los 5000 años, pero al mismo tiempo ha dado lugar a empresas líderes en el mundo tecnológico como LG y Samsung. En las grandes ciudades encontraréis museos especializados en contar la cultura y el arte local, pero también complejos museísticos de carácter absolutamente internacional y cosmopolita.
Sin embargo, los mismos habitantes de las ciudades más avanzadas tecnológicamente son los primeros en aprovechar cualquier ocasión para escapar a la espléndida naturaleza del país, practicando lo que parece ser un deporte nacional: pasear por las montañas. En estos lugares (así como en los antiguos pueblos hanok) se palpa perfectamente la famosa armonía coreana, que disfrutaréis aún más si decidís probar la experiencia del “Temple Stay”, que os permitirá vivir la vida monástica en los centros religiosos más antiguos del país, muchos de los cuales están dispersos en los parques naturales coreanos.
Hablando de cultura y de búsqueda de equilibrio no se puede dejar de lado la cocina coreana, porque este país (igual que Italia) cuenta con una riquísima cultura gastronómica basada en recetas milenarias y, al mismo tiempo, abierta a influencias modernas de los países vecinos y de Occidente. ¿Y la comida callejera? Creednos, tiene pocos equivalentes en el mundo.
Cuando se habla de cultura, es imposible ignorar la Hallyu, o Nueva Ola Coreana (usada incluso como instrumento de soft-power por el gobierno), el increíble aumento de popularidad que el país ha tenido a nivel internacional: hablamos de K-Dramas (las series de televisión que ahora arrasan también en Occidente), de K-Pop y de K-Beauty, ya que los productos de belleza fabricados en Corea del Sur se venden como pan caliente.
Así que, si decidís visitar el país, tendréis mucho por descubrir, pero al mismo tiempo estamos seguros de que os sentiréis muy cómodos gracias a la espléndida acogida local.
¿Listos para descubrir la famosa armonía coreana? Empezad leyendo nuestras guías de viaje.
