Una estancia en Corea en uno de los antiguos templos budistas ofrece la ocasión perfecta para sumergirse en la cultura tradicional coreana y en la vida monástica. Inicialmente concebidas para que los extranjeros descubrieran el budismo coreano, las estancias en templos se han convertido en una experiencia valorada por todos y elegida también por muchísimos locales.
Sin duda, esta es una de las actividades más interesantes y completas que se pueden realizar durante un viaje por este país. Organizarlo requiere cierta atención, ¡pero no será en absoluto imposible si seguís nuestros consejos!
Pasar tiempo en un templo coreano permite vivir auténticamente la vida monástica y comprender mejor la filosofía budista, que impregna esta antigua cultura. Dejar atrás las preocupaciones modernas, despertar con las oraciones matutinas acompañadas de tambores, meditar rodeados de naturaleza, crear manualmente linternas de loto y degustar la cocina contemplativa de los monjes son solo algunas de las actividades incluidas en el temple stay… ¡una combinación especial de espiritualidad y aprendizaje que os dejará recuerdos maravillosos!
Una auténtica estancia en un templo coreano no se parece en absoluto a un día en un resort u hotel, ofrece a los visitantes la rara y significativa oportunidad de vivir como los monjes budistas, que siguen tradiciones antiguas en un país en rápida modernización. Es una pausa serena del caos urbano, una oportunidad para renovar la mente y el cuerpo a través de prácticas de atención plena, para nosotros, los occidentales, también es una forma efectiva de comprender mejor las costumbres de los coreanos, que a menudo están muy ligadas a las prácticas y hábitos religiosos.
Durante una estancia en el templo, se vive de manera sencilla, olvidando el lujo de la vida moderna. A menudo se duerme en una habitación tradicional hanok dentro del templo, participando en ceremonias y prácticas que suelen estar fuera del alcance de los visitantes comunes. Las comodidades son limitadas, pero las recompensas son múltiples: los visitantes dejan el templo con la mente despejada, renovada, enfocada en la búsqueda de serenidad y lista para la contemplación durante el viaje.
Cómo funciona el Temple Stay en Corea
Los programas de estancia en templos están oficialmente establecidos y organizados por el Centro Cultural del Budismo Coreano y tienen como objetivo promover el budismo coreano en el mundo. Los templos tradicionales preservan una historia local de 1700 años y son el lugar perfecto para adentrarse en esta religión y filosofía de vida.
Por lo general, hay tres tipos de experiencias de estancia en templos que se pueden probar en Corea: un programa de un día con actividades culturales, estancias más largas con pernocta y estancias especiales orientadas al descanso y la meditación para quienes buscan tranquilidad y paz.
A continuación, profundizamos en las diferentes opciones.
Temple Stay de 1 día
La opción de un día es ideal para quienes tienen poco tiempo pero no quieren perderse la experiencia. La visita diaria dura unas horas e incluye normalmente un recorrido por el templo, una meditación y una ceremonia del té, que a menudo culmina en una interesante conversación con el monje que os guiará.
Perfecto para quienes tienen un horario apretado o buscan una introducción rápida al budismo coreano.
Temple Stay experienciales con alojamiento
Esta es la mejor opción para una estancia en un templo en Corea, ya que permite pasar una o más noches y participar en actividades especiales. Asistir a las ceremonias budistas cuando el templo está cerrado al público tiene un encanto único. Tendréis la oportunidad de observar el canto matutino de los monjes, las 108 postraciones, practicar meditación sin interrupciones y disfrutar de las comidas budistas.
Otras actividades específicas de cada templo se detallarán al momento de vuestra reserva. Elegid con cuidado… cada templo tiene sus particularidades.
Temple Stay orientado al descanso y la meditación
Para quienes buscan tranquilidad y paz, esta es la opción perfecta, que puede durar varias noches. El templo ofrece un refugio del mundo moderno y enseña a recargar energías a través de la meditación y las ceremonias budistas. Reduce el estrés, relájate y recárgate como lo hacen muchos coreanos.
A qué ceremonias y actividades se participa en los Temple Stay
Durante vuestra estancia en un templo en Corea, participaréis en diversas actividades especiales características del templo elegido, pero también en otras que suelen ser comunes en todos los Temple Stay. Además de una visita guiada por los edificios religiosos, la mayoría de los templos ofrecerá estas experiencias únicas:
108 postraciones: un pilar de los templos coreanos es admirar o participar en el ritual de las “108 postraciones,” que consiste en bajar completamente el cuerpo al suelo 108 veces como un símbolo de desprendimiento de la codicia y del ego. Aunque es un desafío físico, completar este ritual genera un profundo sentido de humildad y purificación entre los participantes.
Da-Seon (ceremonia del té): esta ceremonia budista coreana es una forma de meditación muy especial. Practicando la disciplina mental y la concentración necesarias para preparar la taza perfecta de té, se utilizan todos los sentidos en una contemplación silenciosa. Durante la ceremonia, también tendréis la oportunidad de hacer preguntas valiosas al monje que os acompaña.
Yebool (canto budista): es el canto de apertura que inicia la jornada, diseñado para fomentar la reflexión y la purificación. El Yebool comienza antes del amanecer, por lo que será necesario acostaros temprano la noche anterior para no perder este momento especial.
Balwoogongyang (comida monástica): es el método tradicional de consumir una comida en los templos budistas, compuesto por arroz, verduras y guarniciones. Se trata de una comida silenciosa, saludable y vegana que os hará apreciar los sabores simples y auténticos de la gastronomía monástica budista.
Pohaeng (meditación caminando): es un elemento central de la práctica budista coreana. Consiste en caminar lentamente por el terreno del templo en contemplación silenciosa, con el objetivo de centraros en la sensación de cada paso para calmar la mente. Casi todos los Temple Stay incluyen esta actividad, permitiendo sumergiros con atención plena en la serenidad de estos lugares sagrados.
Cham-Seon (meditación Seon): la meditación tradicional Seon busca liberar la mente de pensamientos para alcanzar un nivel máximo de concentración. Es una de las prácticas fundamentales del budismo coreano para alcanzar la paz interior.
Experiencia cultural tradicional coreana: cada templo ofrece una serie de experiencias culturales únicas, que suelen incluir la creación de objetos con significado espiritual, como linternas de flores de loto, collares de oración o la impresión de frases religiosas en bloques de madera.
A veces, se participa en la limpieza y mantenimiento de los edificios del templo, se ayuda a preparar la comida o se asiste a espectáculos musicales o de disciplinas físicas. Cada estancia en el templo ofrece experiencias culturales únicas, por lo que no es posible generalizar.
Los Temple Stay más populares de Corea del Sur (fuera de Seúl)
Hay muchos templos repartidos por toda Corea donde es posible alojarse. Generalmente, se encuentran dentro de parques nacionales o en entornos naturales encantadores en todas las regiones principales, incluida la isla de Jeju. En este apartado os enumeramos los Temple Stay más conocidos y solicitados fuera del área de la capital (que trataremos más adelante).
Todos estos ofrecen de manera cíclica experiencias de alojamiento, pero debéis tener en cuenta que podrían estar temporalmente suspendidos o no tener disponibilidad en el momento de vuestra visita.
Templo Bulguksa (Gyeongju): es, sin duda, uno de los lugares más impresionantes para vivir una estancia en un templo en Corea. Este templo histórico ha sido declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO y es, de hecho, uno de los centros espirituales más importantes del país.
Ofrece alojamientos que incluyen la meditación matutina al amanecer en su gran patio, la posibilidad de uniros a los monjes en sus rituales diarios y explorar santuarios budistas del siglo XV.
Templo Haeinsa (Parque Nacional Gayasan): remoto pero igualmente accesible para quienes no temen los viajes largos. Situado en un entorno impresionante, enclavado en los verdes valles montañosos del condado de Hapcheon, alberga uno de los tesoros más importantes del budismo en el país: un magnífico canon coreano de madera (Tripitaka Koreana).
Sin duda, es el lugar ideal para quienes aman la naturaleza y desean profundizar en la meditación, la cocina monástica o actividades como la creación de linternas de loto y la escucha de tambores ceremoniales.
Templo Golgulsa (cerca de Gyeongju): el templo Golgulsa ofrece una amplia variedad de experiencias de alojamiento y la oportunidad única de presenciar y practicar el “Sunmudo,” un arte marcial budista coreano. También se puede experimentar la meditación en la playa, el tiro con arco, la equitación y muchas otras actividades interesantes que hacen de este lugar una experiencia singular durante un Temple Stay en Corea.
Templo Naksansa (cerca de Sokcho): el templo Naksansa permite a sus visitantes disfrutar de estancias personalizadas combinadas con ceremonias de oración matutinas entre espectaculares amaneceres sobre el Mar del Este, un trekking guiado hacia un eremitorio en un acantilado con vistas al mar, meditación y deliciosos platos vegetarianos monásticos de sabores simples pero excepcionales.
Este templo es una excelente opción para alojarse si tenéis pensado visitar la costa oriental de Corea.
Templo Beopjusa (Parque Nacional Songnisan): hogar de la pagoda de madera más alta de Corea y de una gigantesca campana de bronce, el majestuoso templo Beopjusa ofrece a sus visitantes experiencias personalizadas como la creación de linternas de loto, ceremonias de canto, cocina monástica y taekwondo, además de excursiones panorámicas en la montaña. Es una destinación muy popular durante la temporada de follaje otoñal.
Templo Hwaeomsa (Parque Nacional Jirisan): ubicado entre los árboles del Parque Nacional Jirisan, el antiguo templo Hwaeomsa ofrece a los visitantes una ventana privilegiada a la vida cotidiana de sus monjes a través de sesiones de meditación y lecciones budistas.
Es un templo especialmente sereno, situado en un entorno perfectamente enmarcado por las montañas.
Templo Sinheungsa (Parque Nacional Seoraksan): situado dentro de este espléndido parque natural se encuentra el templo zen más antiguo de Corea del Sur, construido por un monje itinerante de Silla llamado Jajang Yulsa en el año 652 d.C.
Es un lugar especial, muy fascinante y espiritual que, a pesar de su fama, mantiene una perfecta armonía con la naturaleza que lo rodea. Para saber más sobre el templo y el parque, leed nuestro artículo dedicado a los parques naturales de Corea del Sur.
Dónde hacer Temple Stay en Seúl y alrededores
Seúl ofrece numerosos Temple Stay, desde monasterios en las montañas hasta templos urbanos escondidos entre las bulliciosas calles de la ciudad. Reservando con antelación, es posible pasar una tarde aprendiendo más sobre el budismo coreano en un templo histórico como Jogyesa o Bongeunsa, o refugiaros en el tranquilo bosque de Hwagyesa para un retiro nocturno.
Los templos más conocidos para vivir experiencias sin alejaros demasiado de la capital son:
Bongeunsa Temple
Jogyesa Temple
Myogaksa Temple
Hwagyesa Temple
Geumsunsa Temple
Jinkwansa Temple
No todos tienen siempre programas activos, por lo que es necesario verificar si durante vuestro viaje será posible reservar las experiencias o si están cerrados por motivos internos.
Qué llevar para una estancia en un templo
Dado que la mayoría de los Temple Stay ofrecen alojamientos básicos y un inicio de jornada muy temprano, aseguraos de llegar preparados con una mente abierta y lo esencial para disfrutar plenamente de la experiencia.
Si lleváis un equipaje muy grande, es posible que os pidan dejarlo fuera de las habitaciones en un depósito por falta de espacio. Por ello, es mejor viajar ligeros. No necesitaréis nada especialmente complicado, pero estos son los artículos imprescindibles:
Artículos de aseo personal
Ropa modesta y cómoda (aunque se proporciona un uniforme especial para los visitantes)
Chaqueta ligera en verano o abrigo en invierno
Calcetines, ya que se requiere descalzarse dentro de los templos
Calzado cómodo para caminar
Botella reutilizable para agua
Mochila pequeña para las caminatas guiadas al aire libre
Etiqueta a seguir durante un Temple Stay
Para no dar una mala impresión y, sobre todo, para no alterar la armonía del lugar y poder adentraros plenamente en la atmósfera del templo, recordad prestar atención a vuestro comportamiento y seguir las reglas básicas de la vida monástica. Respetad el silencio hablando lo menos posible y siempre en voz baja, especialmente durante la meditación y en las horas nocturnas. No uséis el móvil para comunicaros, seguid las instrucciones de los monjes y del personal especializado, participad en las actividades con una mente abierta y actitud positiva, vestíos de forma adecuada si no se os proporciona un uniforme específico (con hombros y piernas cubiertos), no llevéis comida ni bebida externa, fotografiad con discreción y únicamente cuando esté permitido, y sed pulcros y decorosos.
Cómo reservar y cuánto cuesta un Temple Stay en Corea del Sur
Os alegrará saber que los Temple Stay son generalmente fáciles de conocer y reservar. Hay dos formas principales de informarse sobre estas experiencias: podéis consultar en línea el sitio web dedicado que también permite realizar reservas, o bien, acudir a una oficina especial en Seúl.
Esta oficina se llama Templestay Information Centre y está ubicada en Insadong. Allí encontraréis personal muy amable que habla inglés y está preparado para guiaros en vuestra reserva.
Si preferís organizar todo con antelación antes de llegar a Corea del Sur, os recomendamos visitar el sitio oficial www.templestay.com/ donde podréis explorar los distintos programas, elegir el templo que más os convenga y hacer vuestra reserva con tiempo, asegurándoos de que haya disponibilidad.
En el sitio también podréis consultar los precios de las diferentes experiencias, para haceros una idea del impacto económico. Tened en cuenta que los precios actuales (en 2024) oscilan entre 30.000 ₩ y 50.000 ₩ para un programa diurno, y entre 60.000 ₩ y 100.000 ₩ para una estancia con alojamiento.
El coste del Temple Stay varía según la ubicación y las actividades incluidas.
